Carlos Jaramillo - "Lo Que Yo Más Quiero Es Ser Recordado Como Un Buen Papá"

Carlos Jaramillo - "Lo Que Yo Más Quiero Es Ser Recordado Como Un Buen Papá"

19 de mar de 2025

En este episodio de "Los Hombres Sí Lloran", Juan Pablo Raba y Dani Posada nos invitan a explorar la salud mental masculina, un tema a menudo ignorado y estigmatizado. A través de conversaciones sinceras con expertos y amigos, buscan desmitificar las ideas preconcebidas sobre la vulnerabilidad en los hombres, fomentando un espacio seguro para el diálogo abierto sobre emociones y bienestar emocional.

Capítulos

Desmitificación de Roles

Este episodio inicia con una reflexión sobre los roles que se auto-imponen las personas, en especial al hablar de profesiones. Carlos Jaramillo comparte cómo ha dejado de identificarse únicamente como médico, buscando ser conocido más allá de su avatar profesional.

Impacto del Entorno Familiar

Carlos relata su experiencia de crecimiento con padres separados y cómo las expectativas inconsultas pueden afectar la salud mental de los niños. Pone énfasis en la necesidad de que los padres hablen abiertamente con sus hijos sobre sus emociones y situaciones familiares.

El Camino a la Vulnerabilidad

En un diálogo profundo, Carlos y Juan Pablo discuten la importancia de reconocer y aprender de los propios errores, entender los propios traumas y ser abiertos sobre ellos en las relaciones personales y familiares. Comparten cómo este reconocimiento es liberador y fundamental para el crecimiento personal.

Renovación Personal y Profesional

Carlos Jaramillo detalla su transición hacia la medicina funcional, destacando la importancia de renunciar a creencias limitantes tanto profesionales como espirituales. Describe cómo dejar atrás su religiosidad le permitió abrirse a nuevas formas de conocimiento y compromiso personal con su bienestar emocional.

Importancia del Balance Emocional

Se conversa sobre cómo Carlos ha integrado prácticas de automejora continua, incluyendo la aceptación personal, la responsabilidad de las propias acciones y el poder de la terapia para mantener su bienestar emocional.

Conclusión

El episodio concluye resaltando la necesidad de crear espacios de conversación para los hombres donde puedan expresar sus emociones sin juicio. Juan Pablo y Carlos comparten la importancia de trabajar continuamente en uno mismo, promoviendo la salud mental como una parte crítica del bienestar integral. Ambos coindicen en que la vulnerabilidad, lejos de ser una debilidad, es una fortaleza que debe ser nutrida y respetada.

Menciones

Ver transcripción
               ¡Suscríbete al canal! y su detector de escamas de tecnología AI spota amenazas instantáneas. También obtendrás 2 millones de dólares de protección contra el antivirus y la defensa de la identidad. Todo por solo $39.99 para tu primer año. Visita McAfee.com. Cancelo en cualquier momento. Termos aplicados. Hola, soy Juan Pablo Raba junto a mi amigo y productor Dani Posada. Te damos la bienvenida a Los Hombres y Yo. Este es un espacio seguro, dedicado a explorar un tema crucial y a menudo pasado por alto, la salud mental, mientras rompemos con los estigmas y estereotipos que la rodean. Acompáñame en este viaje personal en donde me hago muchas preguntas y comparto el impacto que ha tenido en mi bienestar emocional esta búsqueda. Te traeremos conversaciones sinceras con amigos extraordinarios y entrevistas con expertos que nos ofrecerán consejos prácticos para profundizar en las complejidades de la salud mental y la importancia de levantar la mano y buscar ayuda. Este, nuestro espacio, tu espacio, es seguro y se llama Los Hombres Si Lloran, donde la vulnerabilidad es nuestra mayor fortaleza. Te voy a llamar Charlie, porque ya me regañaste una vez cuando te dije Doc, Doc, Doc. No, no me gusta. En primer lugar, Charlie. ¿Sabes qué estaba pensando? Digo, desde que empecé con todo este viaje, tal vez las primeras cosas que yo decidí empezar a hacer fue dejar de presentarme como yo soy actor, porque me parece que es muy limitante a lo que somos como seres humanos, que somos tantas otras cosas, ¿cierto? Pero qué chistoso que igual seguía cayendo el tema del doctor. Tú me hiciste caer en cuenta y te agradezco. Y digo, claro, es como si yo me presentara como hola, yo soy actor Juan Pablo Raba. O en este caso que ahora ya soy podcaster, ¿no? Hola, soy podcaster Juan Pablo Raba, ¿no? Pero además lo gracioso es que ya no es ni siquiera que tú lo hagas, es que la gente te lo pone, la gente pone el título, ¿no? Y no solamente es doctor, es mi doc. Mi doc, doc cómo estás mi do como te va pesa pesa ese pesa ese doctor avatar pues a mí no me pesa si no me pesa porque no lo siento como una carga pero si es algo que me de lo que me he querido desdiferenciar, no porque me avergüence, ni me faltaba, sino que es que yo soy médico en un ratico de mi vida. ¿Por qué me conocen públicamente como Carlos Jaramillo o como el doctor Carlos Jaramillo? No, pues como el doctor Carlos Jaramillo. Entonces, pues si la gente que me conoce públicamente o que me conoce dentro de mi consultorio, o si vuelvo a trabajar en un hospital, pues ahí sí soy el doctor Carlos Jaramillo. Pero aquí no, yo aquí no los atiendo ninguno de ustedes, no soy el médico de ninguno de ustedes. Pero en el restaurante yo no estoy siendo el doctor Carlos Jaramillo, mis hijos no me dicen doctor. En muchas de las empresas donde trabajo, de entrada les digo por favor, nadie me va a decir doctor, porque aquí no estoy siendo el doctor de nadie. Entonces es más algo de lo que yo me he querido desdiferenciar simplemente para volver a ser yo, porque el avatar es muy notorio y a mí me gusta más que la gente me conozca a mí, no al avatar, porque dentro del avatar la gente tiene un montón de creencias, es alto, es bajito, es flaquitico, es gordito, es odioso, es tímido, es extrovertido, lo que sea. Siempre hay una construcción mental, siempre, siempre. La gente siempre que me conoce me dice, yo me lo he imaginado a usted, raya. Siempre hay una construcción, entonces sí es, prefiero que conozcan al ser humano que hay o al ser humano que soy de verdad. Entonces por eso el avatar del doctor lo dejo para las redes sociales porque ahí es donde, por eso también en redes sociales yo nunca muestro nada de mi vida personal. Nunca estoy aquí despertándome, aquí tomando café, aquí pensando si me pongo los zapatos blancos o no, porque eso a la gente no le importa en mi red social, la gente lo que quiere es información y soluciones de lo que yo hago como médico. Te agradezco mucho, significa mucho para mí que estemos aquí, no sé si vamos a hablar sobre nutrición y salud mental, ya veremos de qué hablamos, porque como te dije antes, no hay nada preparado realmente, entonces lo primero que sí quiero hacer es agradecerte porque a mí me conmueve mucho que cualquier persona todavía quiera venir a sentarse aquí y hablar conmigo sobre emociones, sobre salud mental entonces querido Charlie bienvenido a los hombres si lloran gracias, vamos a ver si lloro yo soy duro para llorar, ¿por qué? no sé nadie tiene que llorar, igual siempre lloro, yo soy duro para llorar, ¿por qué? no sé. No, no, nadie tiene que llorar, igual siempre lloran yo, entonces no pasa nada. Mi hijo mayor me dice, papá, ¿tú por qué no lloras? y llorar es muy fácil, y él llora, pero así se emociona y llora, se pone triste y llora, llora un montón, me dice, yo te enseño. Y últimamente, digamos, por cosas muy personales, finalmente me vio llorar y me decía, si ves, si ves, mira que es facilísimo. Qué curioso que lo tuviera como tan presente. Ah, no, él lo tiene súper presente. ¿Cuántos años tiene él? Seis. Ah, es pequeño, me pensé que me ibas a decir que era, o sea, es... No, no, no, no, no, no, no, es, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, ahora yo con 6 años, en ese momento también había llegado mi hija, entonces para mí todo era felicidad, alegría, no porque mi hija no la haya sido, pero mi hija es la que desata en mi crisis pero en ese momento de Joaquín todo era yo era, mejor dicho era inmamable de lo positivo y era casi que positivismo tóxico y yo recuerdo como llevarlo en el carro y mirarlo al espejo y con lágrimas en el ojo porque yo también soy muy emocional y decirle, Joaquín, eres feliz. Y ver a este chino desgraciado, pensarlo realmente y decir, hay días que sí, hay días que no. Así es mi hijo chiquito. ¡Wow! Mi hijo chiquito wow mi hijo chiquito yo me voy de viaje acaba de cumplir tres años hace un mes me dice ay papá te extrañé tanto y me hiciste tanta falta pero yo estuve tranquilo y el otro en cambio yo dormí con tu almohada me eché tu perfume sí llorando pues así como en la melancolía. O sea, mi hijo, él salió como de una novela, Colombo, México, Venezuela, así como, es así, puro corazón y todo lo conmueve. Y prueba un plato que le gusta mucho y llora de la emoción por los sabores que está experimentando. Y el otro es como, está delicioso. Pues, o sea, el otro es todo tranquilo. Demasiado impresionante lo diferentes que pueden ser. Yo no sé nada de astrología, pero ¿qué signo es tu primer? Tauro. Tauro. Yo no tengo ni idea, por eso te digo, mi hijo es cáncer, pero entonces la gente me dice, sí, él es así de sensible porque es cáncer. Y yo, bueno. Sí, yo no sé. Yo me río, yo sigo una cuenta en Instagram que se llama El Horóscopo Negro, y sigo esa, la de Tauro, y me río porque digo, esta gente me persigue. Es lo único que sé de los signos del zodíaco, o sea, lo que esa gente dice, porque me identifico en eso, pero yo también de eso no sé nada. Oye, estaba con un invitado antes que fue una gran sorpresa saber que se conocían con Lino. Me dice que fue tu primer trabajo, me dice que te pagaste la carrera, bueno no sé si... Una parte, una parte en un momento, sí. Uno de los socios de Lino, su mamá es muy amiga de mi mamá. Mis papás pasaron por un tiempo de una dificultad económica muy grande, ambos. Mis papás están separados desde que yo estuve niño, pero ambos tuvieron una dificultad económica muy grande. Y yo no me iba a quedar cruzado de brazos. O sea, la estábamos pasando mal, de verdad, mal. ¿Cuántos años tenías? Diecisiete y yo le dije a mi mamá no, mamá, o sea, háblate con con tu amiga yo necesito que me den trabajo en lo que haya para hacer y ellos me dijeron de una, sí que venga y yo llegué allá, me acuerdo llegué un día, salí de posturno y llegué en uniforme y ellos me vieron ellos como que no sabían bien pues como cuánt uniforme y ellos me vieron ellos no como que no sabían bien pues como cuántos años tenía me vieron tan chiquito que me vieron entrar y dijeron uy llegó Dougie Hauser y así me quedé nunca supieron cómo me llamaba Dougie y hasta el sol de hoy me los encuentro y Dougie sí o sea no tienen ni idea o sea ya seguramente por otras cosas sabrán cómo me llamo, y me dieron trabajo y eso a mí me permitió poder pagar, ayudarle a mi mamá, pagar mercado, pagar recibos de mi casa, porque para ese momento era un ingreso muy alto, pues muy alto para lo que yo necesitaba para poder ir a la universidad y comer, y también era muy bueno para poder ayudar en cosas en mi casa. Y con ellos voy a tener una gratitud inmensa toda mi vida. ¿Vivías con mamá? ¿Qué edad tenías cuando tus papás se separan? Cuatro. ¿A chiquito? Sí, cuatro. ¿Y viviste con mamá siempre? Sí. ¿P chiquito? sí cuatro ¿y tuviste o sea viviste con mamá siempre? sí ¿papá presente? ¿papá? muy presente casi digamos casi todos los fines de semana con mi papá mi papá muy presente muy amoroso muy de la forma de esa generación de ahí está la finca ahí están los caballos ahí está el parque, ahí está todo yo estoy aquí, te amo pero jugando allá pero mi papá es súper amoroso súper presente todos los días y hasta hoy hasta hoy tenemos una relación súper cercana, toda la vida ha ido evolucionando en la medida en que la vida evoluciona pero una relación muy cercana con ambos. Que fortuna. Si, con mi mamá también una relación super profunda. Entre ellos se iban bien, o sea, si, que importante eso. Si, si ellos tenían como un chiste interno y era que la única pelea que tenían era quién me amaba más y la verdad así fue así fue no hubo temas nunca hartos ni peleas hartas ni egos hartos ni cosas legales ni nada porque suficiente con lo que pueda ocurrir en el niño que no entiende yo creo que lo único que en el niño que no entiende. Yo creo que lo único que faltó es que hubieran hablado más conmigo, que no hubieran asumido. Uno asume mucho que los hijos no entienden porque son chiquitos. Me habría gustado que hubieran hablado un poco más, que hubieran sido un poco más sinceros. Así cada uno tuviera su versión, pero que hubiera habido un poco más de sinceridad, especialmente del lado de mi papá. Mi papá es muy de, todo está bien, aquí no ha pasado nada, no te preocupes mi amor. Yo vine a entender qué había pasado por la cabeza de mi papá en la vida de mi papá en octubre el año pasado. Lo senté llorando y le dije yo necesito que me cuentes la verdad de qué pasó de tu lado, no importa, tu verdad. ¿Cómo pasamos de toda esa vida y como dices de esa forma, de esa crianza, a que tú en octubre le tengas que hacer esa pregunta a él. Oscar Wilde, creo que es Oscar Wilde, que dice, cuando chiquito mi papá era mi héroe, cuando me volví adolescente me di cuenta que mi papá era un idiota, cuando me volví adulto me di cuenta que había cosas en las que mi papá tenía razón y cuando me volví más adulto me di cuenta que cómo me parezco a mi papá, cómo juzgamos tanto a nuestros papás y a lo largo nos damos cuenta que ellos tuvieron el permiso y era parte de su vida tener las experiencias que tuvieran que tener y yo tendría las mías. Yo el año pasado me separé y para mí fue muy difícil, muy, muy, muy, muy, muy difícil, porque para mí esa construcción, como yo no tuve a mis papás, lo único que yo quería en la vida era tener una familia. Y la tuve. Y es algo a lo que no voy a renunciar, ese seguirá siendo el proyecto más importante de mi vida, pero dado que ese capítulo se estaba terminando, yo estaba en tanto conflicto, y que para mí era importante poder hablar con mi papá de hombre a hombre, de decirle, hoy yo estoy en una posición quizás similar a la que tú estuviste, hoy soy capaz de entender que posiblemente vaya a extrañar a mis hijos, porque ya no voy a poder estar todos los días con ellos, ya no se me van a pasar a dormir todas las noches encima, ya no los voy a acostar a dormir, porque a mí me gusta, yo soy papá, yo limpio colas, hago desayunos todos los días, a la carta, hago almuerzo, hago cena, lavo platos, lavo ropa, esa es la clase de papá que yo soy, ni bueno ni malo, pero yo dije yo voy a ser el mejor papá del universo para lo que sea para mí, me voy a trabajar a mí mismo, voy a entregar todo por mi hogar, por mis hijos, por todo, pero yo sabía que ese capítulo, yo estaba en mucho conflicto y para mí era valioso saber eso y mi papá por 20 minutos me abrió la puerta porque no la abre nunca y a los 20 minutos pero bueno, bueno todo está maravilloso, todo está fabuloso aquí no ha pasado nada pero me abrió la puerta y por primera vez pude ver a mi papá siendo un hombre de 41 años tal vez en ese momento él que había pasado por la cabeza y yo tan cerca en edad poco menos, pero tan cerca viviendo un momento él vivía el de él y yo vivía el mío, pero nos pudimos compartir como hombres, como papás, lo que cada uno vivió en ese momento de la vida. Y para mí fue súper liberador sentir su dolor, sentir cómo él me decía, a mí me rompía el corazón saber que te iba a extrañar y yo lo vi en un sueño lo sentí en un sueño sentado en el borde de mi cama consintiéndome y le dije ¿es cierto que tú hiciste eso papá? no hay forma de que eso lo hubiera sabido nadie pero sí y yo lo sentí en un sueño en una meditación quedándome dormido y así mismo también pude tener conversaciones con mi mamá que no había tenido nunca y yo lo sentí en un sueño, en una meditación quedándome dormido, y así mismo también pude tener conversaciones con mi mamá que no había tenido nunca, de todo ese momento, también del proceso de decirle a mi mamá cosas como, tú no te preocupes, no vuelvas a estar triste, que yo voy a ser tu esposo y yo te voy a cuidar toda la vida, y poder tener la conversación con mi mamá y decirle, ¿sabes qué, mami? De esa conversación que tuve cuando tenía cinco años, quiero decirte que tú no estás a cargo mío y que yo no soy tu esposo. Y cualquiera dirá, ¡ay, qué comentario! Bueno, para mí era importante, desde mi inconsciente, sacar ese taco. Claro. ¿Y a tu papá crees que también, a pesar de su bueno, bueno, bueno, crees que de alguna forma también lo libera, esa conversación? No tengo ni idea porque no hay forma de volver a entrar. Con él no hay forma de tener conversaciones profundas porque todo está bien. Él ante todo sí me dice, ¿tú estás bien y fue bueno para ti? Sí, papi. Ah, bueno, mi amor, perfecto. Porque todo siempre está perfecto. Para mi mamá todo es drama pues no drama todo hay que llevarlo a una profundidad sentimental y se abren las conversaciones y mi papá es aquí no ha pasado nada y no hay conversaciones yo crecí como entre esas dos cosas yo crecí muy del lado de mi mamá a mí me gusta hablar ir a la profundidad expres expresar los sentimientos, hacerlo todo. Sí, como irme más a este lado. Por eso, con mi papá es más como, papá, pero ¿podemos hablar del tema? No. No, si todo está perfecto, ¿por qué vamos a hablar del tema? ¿Está bueno? Así es mi mamá. ¿Ah, sí? Sí, mi mamá es así. Pero también se nos han abierto esos espacios. Yo en ese momento lo tuve tan joven mi papá, pero más joven. Mi papá falleció hace ya 15 años. Falleció muy joven, falleció de 65 años. A los 25 años, por ahí, yo tuve ese momento con mi papá. Y me senté con él y... Mi papá muy estoico él era argentino terminó mi conversación así ¿qué tienes que decir? y me dijo yo hice lo mejor que pude así así en ese momento me dio tanta piedra y hoy en día siento que hay tanta sabiduría detrás de ese comentario a uno se le olvida que uno resuelve la vida con las herramientas que tiene yo juzgué a mi papá toda mi vida toda pero el día en que yo me vi en una posición similar Yo juzgué a mi papá toda mi vida, toda. Pero el día en que yo me vi en una posición similar, me pude poner en sus zapatos. Y pude pensar por un segundo, bueno, mi papá tenía estas herramientas en la vida. Mi papá es un personaje que no tiene conversaciones profundas, porque no le gusta. Pues, ¿qué me hace pensar que las iba a tener con mi mamá? Y mi mamá quizás habría querido tenerlas y quizás habrían podido avanzar, pero no. Y él en su falta, cuando uno no decide, la vida decide por uno. Y él dejó que la vida decidiera por él, con sus acciones, con sus omisiones, con lo que fuera. Por eso para mí es tan importante uno ganar herramientas en la vida. Si yo resuelvo la vida con las herramientas que tengo, pues lo más valioso que puedo hacer en la vida es ganar herramientas. Entonces desde ahí como que nunca, desde hace muchos años no volví a juzgar a mi papá y entendí que él resolvió la vida de esa manera y acepto y respeto su proceso y soy capaz de observarlo, simplemente como un observador sin juicio. Oye, ya hablas de trabajar en ti. ¿Cómo trabajas o cuándo decidiste trabajar en ti? Hay una frase que le oía al dueño del colegio donde estudiaba mi hijo antes de que nos fuéramos a vivir a Estados Unidos, que decía, un principio del colegio es cuide de mí para cuidar de otros. Y para mí eso tiene toda la lógica y toda la coherencia del mundo. Yo no puedo prescribir algo que yo no vivo. Y una cosa es prescribir medicina y otra cosa es prescribir salud. Y a mí me gusta prescribir salud. Y la salud es salud mental, es salud emocional, es salud física. Yo no te puedo decir que comas bien si no se come. No te puedo decir que ayunes si nunca me he ayunado. No te puedo decir que entrenes si no entreno. Yo creo que los médicos deberíamos ser las primeras personas que más saben de hábitos de salud mental, pero porque trabajamos en la nuestra. Entonces yo desde la universidad empecé a cuidar de mí con lo que creía que era cuidar de mí, o sea tomaba gaseosa light porque creíapecé a cuidar de mí con lo que creía que era cuidar de mí. O sea, tomaba gaseosa light porque creía que eso era cuidar de mí, porque venía del mundo de las calorías y eso era un gran boom para ese momento. Pero siempre me interesé por eso. Hacer ejercicio, ser buena persona. Para mí, digamos, desde muy chiquito fue muy importante programarme para ser buena pareja. Ok. Desde muy chiquito. Desde antes de que tuviera pareja, como que yo decía, bueno, yo me voy a programar. Y voy a ganar las herramientas para hacerlo. Y yo creo que eso me ayudó de alguna manera a cuidar también mi salud mental, cuando paso del mundo de la cirugía al mundo de la medicina funcional, en la medicina funcional me encuentro con un mundo donde hay más profundidad en la salud mental, hay más profundidad en los hábitos, hay más profundidad en el efecto que tiene todo esto, y pues es apenas obvio, la vida de un carro, ¿qué es? Pues como uno lo maneja. La vida de un humano, ¿qué es? Pues como vive. Es que es lógico, ¿sí? Solo que no lo volvemos tan lógico, porque estamos en un modelo de enfermedad únicamente, que es necesario, no lo estoy criticando, es necesario, pero el modelo de enfermedad es tan necesario como el modelo de salud. El taller del carro es tan importante como la forma como se maneja el carro. Las dos cosas son necesarias, no es lo uno o lo otro. Y cuando entro en este mundo, pues me empiezo a interesar mucho más. ¿Dónde creo que estaba mi gran limitante? En mi religiosidad. Porque yo siempre me ha llamado mucho la atención la espiritualidad, toda mi vida. Pero practicaba una religión donde medio mirar para el lado era gravísimo y no podía mirar para el lado. Y un día conocí, cuando fui a Japón y conocí una cultura que no seguía nada de lo que yo había visto y de lo que para mí era la verdad, y tenía una forma de resolver la vida muy interesante. Y después yo me voy a abrir a otra posibilidad. Me dijeron también que si me abría a otra posibilidad, que eso hacía que yo ya no pudiera pertenecer a ese culto. Y dije, bueno, pues entonces si me van a echar, échenme, o si no me han echado, pues yo me echo solo. ¿Venías por herencia a ese culto? Sí, claro. ¿Venías de madre? Sí, sí, sí. Y el día que abrí mi cabeza a estudiar el budismo como camino de filosofía y empiezo a abrirme a la posibilidad de ver cómo los seres humanos han resuelto la espiritualidad y el camino de conciencia y el camino de resolver mi propia vida. De otras maneras, para mí fue súper enriquecedor y eso me hizo explotar a muchas cosas. Eso me hizo... a mí antes me encantaba pelear como médico. De la misma manera como en algún momento peleé por mis creencias, también peleaba sobre mis creencias como médico. Y también pues con mucho ego, porque uno pelea desde el ego. Y peleé con muchos médicos, peleé con muchos nutricionistas, y me enganchaba en eso. Hoy en día me avergüenzo de eso, no hay ninguna forma, como pudo haber sido diferente, resolvida la vida con las herramientas que tenía. Volvemos a lo mismo. Abrir mi mente y haber de alguna manera renunciado a mi religiosidad y ver cómo mi espiritualidad se abrió de esa manera tan grande me hizo de la misma manera aprender a renunciar a mis creencias y uno dice, pero es que la ciencia no tiene creencias si, la ciencia si tiene creencias la ciencia intenta validar cosas que primero se viven desde una creencia intenta validarlas, pero las vuelve ciertas por un periodo de tiempo, no verdades, ciertas. Las cosas ciertas tienen un contexto. sea, no sé, ultracarnívora, y te van a hablar de toda la ciencia del carnivorismo y cómo el veganismo es una patraña, y hablas con un vegano y te van a decir cómo toda la ciencia del veganismo y cómo están salvando al planeta y cómo están salvándose a sí mismos y todo, y el carnívoro lo va a criticar y va a decir que es patraña, y el vegano critica al carnívoro diciendo que todo lo que él dice es patraña. Los dos están diciendo cosas ciertas, ciertas, que tienen un marco de un contexto social en el tiempo, en el espacio, en todo. Ciertas. Y envía un mensaje a Beth y Steve. Y lo hace sin que me levanten un dedo. Así que puedo hacer más squats donde pueda. Uno, dos, tres. ¿Eso será dinero o crédito? Crédito. Cuatro. Galaxy S25 Ultra. El compañero de la AI que hace el levantamiento pesado para que tú puedas hacer tú. Puedes obtener tu propio en Samsung.com. Compatible con aplicaciones seleccionadas. Recomienda un account de Google Gemini. Los resultados son muy basados en respuestas de respuesta de input check para acuración. Este episodio fue traído a ti por State Farm. Puedes decir todo tipo de cosas cuando las cosas van mal. Compatible with select apps. Requires Google Gemini account. Results may vary based on input. Check responses for accuracy. Habla con tu agente para elegir la cobertura que necesites. Tienes opciones de cobertura para proteger las cosas que más vales. File un aclamado en la aplicación móvil de State Farm y incluso acércate a una persona real cuando necesites hablar con alguien. Como un buen vecino, State Farm está ahí. oportunidad de abrirme a oír tu camino y yo por eso leo de todo, de todo, en ciencia, leo de todo, hasta con la gente con la que no estoy de acuerdo, para ver qué es lo que tienen para decir. Y yo cualquier día, Juan, estoy dispuesto a renunciar a cualquiera de mis creencias y empezar a trabajar sobre otras cosas y empezar a seguir un camino cualquier día. Entonces eso, trabajarme en mí ha sido una intención de toda mi vida que se explotó desde el día que renuncié a mi religiosidad y eso hoy lo puedo llevar a cualquier cosa en mi vida, a cualquiera. Y para mí es súper liberador, no me caso con ninguna creencia con ninguna de nada cantas o que dices yo tengo convicciones claro si tengo convicciones firmes como la familia como si es pero no me casarme o acalorar me en una pelea y todo el tiempo trabajo en mí, todo el tiempo, me encanta trabajar en mí. Hay una palabra en la que huyo, literalmente. ¿Cuál? Verdad. ¿Ah, sí? Sí. Me he devuelto automáticamente. Sí, las verdades en el universo son muy pocas, el resto son cosas ciertas. Exactamente, esa no había visto de esa manera que eran cosas ciertas. Es que yo también estuve en un culto de verdad. Sí, claro. Durante un mes y medio, hasta que una visita a uno de esos templos de verdad dijeron que había que entre todos teníamos que expulsar los demonios de Shakira ¿verdad? así fue así fue y ahí mismo y Piqué es quien lo dirige hace mucho más tiempo entonces ya yo tampoco pertenezco más a ese culto de verdad y desde entonces siempre cualquiera que me diga que tiene la verdad como que me doy media vuelta y digo compadre son cosas muy diferentes oye como tienes porque no pareciera pero eres de familia de médicos? No, nadie, pero ni cerca, ni en generaciones, nada. Porque eso es de las cosas como los militares, ¿no? Es como que vienen todos, ¿cómo nace eso en ti? A mí ser médico me parecía que era como hacer magia. Desde muy niño me parecía que el hecho que... O sea, yo iba al médico, me llevaban a mí al médico, y yo lo veía, todavía me acuerdo a que huele, a que huele al pediatra donde me llevaban. Y yo lo miraba, y yo decía como que estará pensando. Y cómo me tocaba y como me ponía y se cogía la barba tenía una barba negra, negra, negra ¿cómo se llamaba? ¿te acuerdas? Santiago Correa, obvio que me acuerdo igual siempre me formulaba el mismo antibiótico o sea, pero sabía horrible pero pero yo lo veía Pero sabía horrible. Pero sí. Pero yo lo veía y el simple hecho de mejorarme, a mí me parecía mágico. Poder tener la magia del diagnóstico, porque el diagnóstico es una magia, es un arte bellísimo. Cuando la gente critica tanto la experiencia de un médico, le digo, si tú no tienes experiencia y no honras tu experiencia, no creo en ti como médico porque no sabes diagnosticar. Porque hay cosas que van más allá de la imagen diagnóstica puntual. Hay algo que te tiene que hacer oler para pedir esa imagen diagnóstica. Hay parte que está en el oído, en el sentir, en el oler, que trasciende. Y si no, entonces yo estoy loco y a mí me gusta hacer medicina así. A mí me gusta oler, abrazar a la gente, sentirla, todo. Trabajar sobre ese nivel de sensibilidad y después desde esa sensibilidad poder conocer a alguien para ayudar a mejorar su salud en cualquier sentido, uy, a mí me parecía magia y hoy cada día me parece aún más mágico. Uy, yo amo lo que hago. Parece bellísima. Cada uno mirará cómo la quiere hacer. ¿A qué edad lo decides? Porque eso fue una decisión. No, desde muy chiquito me encantaba y pedía que me regalaran kits. ¿Y qué edad lo decides? Porque eso fue una decisión. No, desde muy chiquito me encantaba y pedía que me regalaran kits. ¿Y siempre fue así? No, mira que no. Mira que no. A mí me gusta, yo soy muy inquieto. Mentalmente, muy inquieto. Me gusta aprender de todo mental y en herramientas. Entonces me gusta estar aprendiendo cosas todo el día. Yo tengo un border collie y yo digo que parezco como el border collie que quiere estar aprendiendo cosas todo el día. Los aviones me fascinan. Me fascinan los aviones. Entonces hubo un tiempo en que dije, quiero ser piloto. Me encanta el arte. Soy súper apasionado por el arte. Soy súper apasionado por el arte y soy súper apasionado por el diseño arquitectónico. Entonces dije, como que también quiero ser arquitecto. E incluso cuando me gradué del colegio entré a estudiar arquitectura. O sea, tuve como una fuerza muy grande y a los tres meses yo dije, no, ¿yo qué estoy haciendo? Entré a estudiar medicina. No siempre fue así y hoy también por eso no siempre es así. Por eso no me gusta que me digan doctor, porque cuando estoy en el techo arreglando una gotera después de haberme visto 45 videos sobre cómo se arreglan goteras y cuáles son los mejores materiales ¿sí? Cuando vivía en California, un día me dice mi vecina, que era así toda encopetada, me dice, ¿cómo te parece que vi a tu jardinero? ¿Cómo se parece a ti? Lo vi el otro día cortando árboles y pensé que eras tú. Pues era yo. Pero tú que hacías encima del árbol con una motosierra y le, pues, cortando árboles. Tú yourself, claro. Claro, pero a mí me encanta. Sí, sí, me identifico mucho. Entonces como me encanta hacer tantas cosas, también por eso digo, pues yo un ratico de mi vida soy médico. Yo por eso socialmente nunca hablo de salud. Esos que llegan a todos lados siendo el doctor Carlos Jaramillo a todos lados claro sí, no cuéntame de tu trabajo no del mío en mi cabeza siempre hay como un sitcom cuando conozco esas familias donde todos son médicos por ejemplo y me imagino cómo será una cena en esa casa les rasca el pabellón auricular y el globo ocular de hoy me aman maricones. O sea, no tienes ojos, ya no tienes ojos. Todo es en ese lenguaje, me parece aburridísimo. Oye, pues antes hablaste de una quiebra, digamos, o bueno, de una situación económica compleja de tus padres. En ese momento de la universidad entras a trabajar. En ese momento de la universidad, entras a trabajar. ¿Cómo recuerdas esa época universitaria, esa época de convertirte, de tener una profesión? ¿Qué recuerdas de ese tránsito? Primero, a mí no me parece que estudiar medicina sea difícil. A mí me parece que estudiar medicina es absolutamente delicioso. Si uno sabe que no va a tener el mismo tiempo que su compañero del colegio que estudia otra carrera, que pronto va a tener un poco más de tiempo para otras cosas, pues requiere un poco más de rigor estudiando y todo eso. Como a mí me encantaba, desde el primer semestre me gustó todo, todos los semestres, todo, entonces a mí me encantó. Entonces yo siempre lo hice con mucho gusto, con mucho gusto, con mucho amor, con mucha pasión, siempre me gustó todo, hubo cosas que me gustaron menos, pero todo me gustaba. Entonces estamos en esto a resolver con toda, yo quiero seguir estudiando, la estamos pasando mal, que nos corten la luz si tengo que leer, pues es aburridor, obviamente, porque pasó, no tener que comer algún día, no todos los días, pero que hubiera por lo menos un día de no tener que comer, pues es aburridor, y yo ahí dije, esta no me vuelve a pasar, y empecé a organizarme a trabajar. Yo ahorraba una parte, de eso que ahorraba le pedí un préstamo a mi abuela para comprar unos carritos de estos con los que lavaban los carros en los centros comerciales. Lo puse en la clínica del country en Bogotá, tuve mi primer empleado, tuve mi primer negocio, con eso ahorré para ir a comprar corbatas a Estados Unidos y venderle a todos mis profesores que se ponían corbatas y empecé a ahorrar y ahorrar y empecé a leer de matemáticas financieras, matemáticas personales, libertad financiera, ¿por qué? porque esta no me vuelve a pasar. libertad financiera, ¿por qué? porque esta no me vuelve a pasar. Desde chiquito como que empecé a tener mi propia libertad financiera, no me alcanzaba para absolutamente nada, diferente a tener resuelto por lo menos unos meses de mi vida, pero para mí eso era suficiente en ese momento de mi vida, y eso me dio mucha paz, resolver poder resolver eso por mucho tiempo incluso cuando cuando empecé a trabajar eso también me hizo tener la tranquilidad cuando deje de estudiar cirugía cuando me metí a estudiar medicina funcional que me endeudé terriblemente en algo que nadie sabía que nadie conocía pues yo ya tenía como muy la determinación de yo sé que con esto voy a hacer algo, yo sé que voy a salir adelante, yo sé que lo voy a sacar adelante. O sea que es una especialización en la medicina funcional como tal. En este momento como han salido todas las especialidades médicas, que en algún momento es un grupo de hippies que hace algo en particular y después lo vuelve una especialidad, seguramente eso va a pasar tarde o temprano, pero es una formación de tres años muy profunda yo estudié mucho más estudiando medicina funcional que estudiando cirugía por eso cuando hay gente que me he ganado enemistades, que hay gente que hace un curso de cuatro meses y somos colegas, le digo, no hiciste un curso de cuatro meses ve y estudia esa profundidad y te vas a dar cuenta que te faltan herramientas, porque si no vas a salir a equivocarte. ¿Cómo podríamos definir la medicina funcional? Es un abordaje de la medicina muy, muy, muy enfocado siempre en la causa, no en tratar la consecuencia sin preguntarme qué fue la causa. Entonces siempre es la causa al porqué del porqué del porqué del porqué del porqué. Y si las soluciones implican medicamentos, pues se soluciona con medicamentos, no quiere decir no usarlos. Pero también abre un poco más el espectro a los suplementos, que hoy en día ya están muy en boom. Cuando yo lo empecé a hacer, nadie hablaba de suplementos, nadie sabía de suplementos, ni botánicos, ni mucho menos de cómo incorporar los hábitos de manera científica de manera terapéutica nadie hablaba de eso esa situación en mi vida juan para mí fue muy difícil pero fue un regalo de mindset impresionante claro hizo que se me hizo ganar mucha confianza en mí. Y por eso yo soy bruto pero decidido. A darle con toda. Con toda. Hay un proyecto, vamos. Hay un problema, vamos. ¿Qué es lo que vamos a aprender de esto? Hay esta dificultad, maravilloso. Nos llegó un requerimiento, no sé, de la SIC. De una. Le vamos a responder y les vamos a mostrar todo lo que hacemos y por qué lo hacemos. ¿Se parece un poco a tu papá? No, porque mi papá es aquí no ha pasado nada. Ok. Aquí vamos a ver todo lo que hay para hacer y lo vamos a hacer para aprender. Sí, es bienvenido los problemas y bienvenido todo el aprendizaje que tenga que venir de esto. Esa misma mentalidad también para tu situación actual, para separarte, mudarte, para o sea, cómo, cómo, cómo, cómo la enfrentas igual. Yo tengo la, yo tengo la posibilidad de verlo como el fracaso más grande de mi vida, del cual no voy a salir nunca porque esto fue... O saber que tuve la dicha de vivir lo positivo que pudimos vivir, de construir las cosas tan maravillosas que pudimos construir, asumir, no como hace mucha gente cuando se separa, que es así, y dan muchas ganas, porque es que a mí lo único que me corresponde es esto. Porque si mi sueño, vuelvo y te digo, el sueño más grande de mi vida no es ganarme el Nobel, no es tener múltiples reconocimientos, no es que en la universidad de X haya una placa, yo tengo un sueño y quiero ser recordado como una sola cosa, una. El sueño más grande de mi vida es mi sueño de familia y de pareja, ese es el sueño más grande de mi vida. ¿Qué me quita el aliento? Bailar a los 80 años con mi pareja y haber tenido, obviamente que no sea mi pareja que conseguí hace 15 días, pero obviamente que haya sido la construcción de una relación larga, hermosa, de crecer, de vivir, de todo. Ese es el sueño más grande de mi vida y lo voy a cumplir. Y por eso, de nuevo, por eso me preparo tanto y por eso yo tengo que hacer así y mirar cuál fue mi cuota para no volverla a repetir y poner a mis fantasmas a dormir, mirarlos a la cara, decirles ya no me dan miedo y avanzar y seguirme enriqueciendo a mí mismo y lo que yo más quiero es ser recordado es como un buen papá que mis hijos me recuerden como un buen papá me tienen sin cuidado si me recuerdan como el médico que eso durará 15 días más yo quiero permanecer en la memoria de mis hijos punto eso es lo único como lo que me gustaría ser recordado no me interesa nada más no tengo ningún otro ego ninguna otra vanidad nada hay gente que llama un éxito en el matrimonio casarse una sola vez y durar toda la vida pero a veces uno habla con esas personas y son dos personas que llegaron a viejos siendo extraños desde hace muchos años pues yo no quiero eso a veces uno aprende a montar en bicicleta cayéndose un par de veces hay mucha gente que cree que por este momento de mi vida y por el nivel de reconocimiento y todo entonces que ahora voy a salir a enloquecerme y a salir con todas y a hacer de todo pues yo no sé así. Si el proyecto más importante de mi vida es ese, yo no voy a salir a pendejear. Sigo preparándome para ese gran proyecto de mi vida, entendiendo cuáles son mis aprendizajes, qué fue lo que no aprendí, en qué me equivoqué yo. Así uno llega, vuelvo y te digo, eso no se trata de ver de quién fue la culpa. Tengo la dicha que no hubo temas de cosas fuertes, graves, algo que no supimos resolver de forma crónica. Y listo. ¿Cuál fue mi cuota? Y eso es lo único que a mí me corresponde, güey. Conmigo. ¿Sí? Conmigo. ¿Cuál es mi aprendizaje? Conmigo. ¿Cuál es mi aprendizaje? ¿Esta es la realidad en este momento? ¿Que tiene un aprendizaje? Sí. ¿Puedo seguir viviendo en California en este momento y es sano para mí, es sano para ellos, es sano para mis niños? No. ¿Qué es lo más sano? Vivir en un entorno donde tengamos amor. ¿Dónde tenemos amor? En nuestro país. Donde están las personas que conocemos, ese es el entorno más amoroso, listo, vamos. Y sigo preparándome y el día que llegue esa persona pues tendrá la mejor versión de mí en ese momento y que sepa que hay cosas que no voy a volver a negociar. Que sepa que hay cosas abiertamente en las que le puedo decir, en esto erré y hoy trabajo para no errar. Contarle cuáles son mis heridas de pronto de mi infancia, que no le corresponde sanarlas ni nada, me corresponde a mí. Pero te las muestro y me hago vulnerable simplemente para que las cuides no hay ninguna necesidad de ir a abrirlas y siempre saber que estoy trabajando sobre mi mejor versión, siempre y lo mismo para mostrarle a mis hijos mostrarle a mis hijos que existe la posibilidad no era lo que yo quería, no era tampoco lo que Adriana hubiera querido, tampoco porque ninguno de los dos nos metimos en esto pues para sí, claro pero mostrarles que hay una forma de trascender de esto dentro de la mejor versión Tampoco lo que Adriana hubiera querido, tampoco. Porque ninguno de los dos nos metimos en esto para... Sí, claro. Pero mostrarles que hay una forma de trascender de esto dentro de la mejor versión, yo haciendo lo que a mí me corresponde. Y es ser el mejor para ellos, el mejor para la relación que tendré toda la vida con Adriana, aportándole al proyecto de nuestros hijos, y el mejor para mí mostrándoles cómo yo sigo siendo un gran hombre por eso me cuido tanto de eso por eso no salgo a pendejear, por eso no salgo a rumbear sí, por eso no me voy a salir a hacer bobadas simplemente trabajo a mí mismo y me pongo disponible para recibir a una nueva persona en mi vida. Y ya. Sí, pues eso es lo único que tengo para hacer. No se trata de nadie más, se trata de mí únicamente. Absolutamente. Dicen por ahí una frase que me gusta mucho y es que lo más grande que yo puedo hacer por ti es trabajar en mí. Y lo más grande que tú puedes hacer por mí es trabajar en ti. Claro, claro. Y las parejas requieren ese trabajo todo el tiempo. Mira cuántas parejas no se separan cuando una entra en un trabajo personal muy grande y de pronto empieza no a ascender a volverse mejor, simplemente a coger un camino y el otro se siente absolutamente incómodo y no quiere salir de ahí y le gustaba ir a donde estaban antes. Y es válido. Decir, no, vení para acá. Me gustaba, era como estábamos antes con las creencias que teníamos y ahora que estás teniendo otras. Por eso me parece tan importante que los dos se trabajen a sí mismos siempre. Eso no garantiza nada. Pero eso sí permite mucho avance. Mucho avance. Estar como afilándose constantemente, ¿sí? Hierro con hierro. Totalmente. Afilándose. Dentro del amor. Con agüita. Sí, claro. No afilándose no es darse duro. Te afilo para... Me trabajo a mí mismo y tú como mi espejo y me lo muestras para yo ser lo mejor de mí, de la manera más amorosa y tú te trabajas a ti y yo te muestro ese espejo y te acompaño en ese proceso y ahí vamos. ¿Cuántos años de matrimonio? Estuvimos 10 años juntos Sí, es es un proceso es hermoso y superar dificultades es magnífico, pero como nos han vendido la idea, Disney sobre todo, del príncipe azul y la princesa, y fueron felices, nos han hecho pensar que encontrar a esa persona es como el fin último, resulta que ahí es donde empieza el cuento, es conoces a la persona y ahí realmente empiezas a conocer a la persona. Sí, sí, y ella es una mujer maravillosa y seguramente ambos tendremos los aprendizajes y eso no quiere decir que la siguiente persona que llegue a mi vida o la siguiente persona que llegue a la vida de ella no puede traer dificultades, o la siguiente persona que llegue a la vida de ella no puede traer dificultades, traer a otras. Y yo estoy lejos de ser perfecto y tengo un montón de pendejadas por resolver y un montón de pendejadas de las que no tengo ningún problema de decirle a la siguiente persona que llega a mi vida pues mira, a mí me cuesta trabajo esto y esto y esto. Y hay días en que soy este y este y este y hay días en que soy insoportable de esta manera. Antes dijiste fantasmas. Al hacer fantasmas. ¿Los tienes identificados? Sí. Mi mayor fantasma es el abandono. Ese es mi mayor fantasma. Sí, por el divorcio de mis papás. Justamente porque nadie habló conmigo. Porque todo está bien. ¿Cómo así que está bien si las maletas están en la puerta de la casa? Ese fue mi mayor fantasma por muchos años. Eso me hizo aceptar en muchos aspectos de mi vida cosas que no quería aceptar, negociar cosas que no quería negociar, bajo el miedo a la pérdida. Hoy ese fantasma ya no me visita, existe, pero no igual que hace 5 años, no igual que hace 10 años, no igual que hace 20 años. Sería capaz de mostrárselo a otra persona para decirle, es para que simplemente de nuevo, no te corresponde sanármelo creo que está sanado pero pues de alguna manera si en pareja nos vamos a amar pues que tus acciones sean unas acciones coherentes con eso muéstrame cuáles son los tuyos y mis acciones pueden ser coherentes con eso para poner un ejemplo cualquiera, si yo mañana salgo empiezo una relación con alguien y me dice oye, ¿sabes qué? a mí me encantaría, de amigos irme a un crucero con mi ex pero es de amigos, es porque queremos hablar de unas cosas y todo pues, yo no sé, no me sentiré tan cómodo con esto. Sí, estoy poniendo algo un poco absurdo. Pero es decir, ¿por qué no se pueden ir a tomar café? Es algo, estoy poniendo una cosa en el extremo patológico. Entonces, si sabes que eso es una posibilidad, pues uno puede tener empatía por el otro y decir yo sé que esto es potencialmente incómodo para ti, pues cuido la manera como lo hago y cada uno puede tener heridas del amor distintas. Sin duda, ¿fue diferente lo que tú recuerdas de ese momento en tus papás a cómo tú lo estás navegando con tus hijos? Completamente, completamente, o sea yo con mis hijos nunca he asumido que porque son niños no les hablo. Yo les hablo como si fueran dos adultos con lo que necesitan saber obviamente, pero les he hablado todo el tiempo y esto es lo que vamos a hacer y esto es lo que va a pasar. Y si viste a papá llorar, papá estaba llorando, pero es un sentimiento que me corresponde a mí, no te corresponde a ti, porque los niños se cargan las emociones de los papás, me corresponde absolutamente a mí, es algo que yo estoy transitando, es algo que yo voy a gestionar, es algo que a mí me corresponde, aquí estoy para ti, siempre voy a estar contigo, siempre te voy a cuidar, siempre te voy a proteger, aquí estoy protegiéndote, ¿sabes? Como todo el tiempo. Porque si no, pues estoy repitiendo un patrón y no estoy aprendiendo del patrón, del hueco que me quedó a mí. Y lo mismo, ¿me quieres preguntar algo? Pregúntame todas las veces que quieras. ¿Quieres volver a decirme papá? Pregúntame papá por qué. Y cometeré errores y he cometido errores y seguramente generarán cosas en ellos de las cuales estoy dispuesto a verlas hacia el futuro también para ayudarles a ellos a transitarlas cuando las tengan que transitar ¿Te sorprendió cuando lloraste? ¿Cuál de todas las? Tú me dijiste al principio que no, o sea que tu hijo te había visto y te dijo, mira, papá, sí se podía. Pues claramente, pues supongo que no es que pase muy a menudo. No, ese proceso de todas maneras fue triste, obviamente. Fue triste y fueron meses en que pude llorar lo que no había llorado los últimos 30 años de mi vida. Sí, fue muy liberador. Fue muy liberador. Las conversaciones con mi papá fueron muy liberadoras y lloré mucho. Las conversaciones con mi mamá fueron muy liberadoras y lloré mucho. Y las conversaciones conmigo fueron muy liberadoras, con mis hijos. Todo fueron... Pero sí, fue muy liberador. Y hablaste de terapia también. Y entonces aquí sí quisiera hacer un pequeño apartado porque lo hacemos siempre. Si hay una constante, sí es que me gusta conocer las herramientas. Las que se sientan conmigo. ¿Cuáles son para ti tus herramientas para mantener tu centro, para mantener tu balance hoy en día? tu balance hoy en día? Mi mayor herramienta en la vida en este momento es que yo me hago 100% responsable de mí, me hago 100% responsable de mis actos, me hago 100% responsable de lo que digo, de lo que omito, me hago responsable, asumo mi vida con responsabilidad y trabajo mucho sobre el principio de la aceptación y el respeto y es que acepto y respeto tu proceso tus creencias tus opiniones, tus acciones, así me cuesta el trabajo, así sean sobre mí y no me gusten acepto y respeto lo que tú tienes para decir de mí. Observo si tiene algo que ver conmigo y tengo algo para aprender. Si no, pues no. Y si sí, pues aprendo. Acepto y respeto mi pasado, el cual resolví con las herramientas que tenía en ese momento y no podía ser diferente. Acepto y respeto tu pasado, que también lo resolviste con las herramientas que tenías. Entiendo que yo hoy tengo derecho a ser un ser humano completamente diferente al que era hace cinco minutos, y es un derecho que yo tengo en la vida. Cuando uno vive la vida así, o por lo menos cuando yo aprendí a vivir la vida así, cada vez que me dan ganas de volver a ser víctima y de vida así, o por lo menos cuando yo aprendí a vivir la vida así cada vez que me dan ganas de volver a ser víctima y de estar así tengo quienes me recuerdan estar así y hay veces en que la víctima se disfraza de formas en que no soy capaz de verla, y viene mi terapeuta y me dice, ¿te estás dando cuenta cómo estás siendo víctima con esto? No así, y ¡foc! Y le quita la máscara y me muestra que soy yo siendo víctima. Y me encanta, porque a mí me encanta trabajar en mí. A mí no me importa que me digan, ese saco está horrible, esos tenis están horribles, esa presentación que hiciste está horrible, este libro es el peor que has escrito. A mí no me importa, a mí me encanta saber en qué puedo mejorar. Entonces cada vez que mi terapeuta me lo dice, yo tengo dos terapeutas, me dicen amorosamente en todas las formas en que estoy siendo víctima o que me estoy yendo de nuevo y me hacen así, me encanta, porque sigo teniendo la posibilidad de trabajar en mí, y a mí me gusta trabajar en mí. Eso que dices tiene mucho valor, porque uno de los grandes principios de este espacio siempre ha sido mostrar vidas o vivencias o tránsitos por este camino, que en apariencia son absolutamente perfectos y armoniosos, pero que en realidad siempre necesitan trabajo. Y mucha gente piensa que, pues, doctor exitoso no va a tener ningún problema y que no va a necesitar. Y mucha gente desafortunadamente interpreta la terapia como casi que es problemático, o que es para gente problemática, o que es de locos, o que, ¿sabes? Y una de nuestras tareas siempre ha sido como quitarle estigma justamente a eso. Y es, uno va a terapia simplemente para poder conversar con alguien, para poderse chequear, para lo que tú dices, para poder hacer esto, ¿sabes? Con esa paz y con esa tranquilidad, es decir, en dónde puedo mejorar. esa tranquilidad, decir en dónde puedo mejorar. Pero si las empresas tienen auditoría, junta de accionistas, revisión fiscal, todo, ¿por qué están mal? No, porque están bien y quieren seguir estando bien. ¿Yo por qué no puedo ir al médico a que me revisen la sangre, la orina, el colon, la próstata y mi cabeza? ¿Y me hago auditoría a mí mismo con una persona que me ayuda a hacerme auditoría porque además la vida es así yo puedo estar perfectamente bien y en un momento u otro llenarme de un montón de creencias y de cosas, tú, ¿qué tal que te hubieras convencido de los demonios de Shakira? te vuelves otro Juan Pablo Raba expulsado por todos lados de túnica, antichakirista. Te verías que se enfermó en Perú. Bien. Exacto. Sí. Fui yo. Libérenla. Entonces, pues a mí me encanta hacerme auditoría. En tu experiencia. Sí. ¿La salud física tiene que ver con la salud mental? Sí, claro. El cuerpo enferma a la mente y la mente enferma al cuerpo. Y eso no es en mi experiencia. Te lo llevo a un estado crítico, pero es fácil de entender. Una persona hospitalizada con una infección en el cuerpo en dos segundos delira. Tiene alucinaciones mentales, tiene alucinaciones auditivas, dice incoherencias. Y es el cuerpo enfermando a la mente. Así como la mente enferma al cuerpo. La gente que dice que la mente enferma al cuerpo, que eso es nueva era, esos médicos hippies, te falta leer un montón y darte cuenta la fisiología desde la construcción de la psico, neuro, gastro, endocrino, cardio, todos los niveles a los que se puede llegar, al nivel subatómico se puede llegar. Y está descrito, no es la jaramillología inventada. Entonces sí, absolutamente, muchos niveles, la nutrición enferma la mente, de manera positiva puede afectar la mente de manera negativa. Dame un ejemplo, pues si te tomas cuatro cafés de taco, ¿te has dado cuenta que tienes síntomas mentales? Sí. Bueno, pues eso puede ocurrir en muchos niveles con muchas cosas. Se afecta la mente porque tenemos receptores que responden a eso. Entonces negarlo, hacer ejercicio afecta la mente de manera positiva. No hacer ejercicio afecta la la mente de manera negativa y es una práctica física con impacto mental. Cantar un mantra es una práctica física que tiene un efecto vibracional mental, es real. si no, pues nos llevarían estos personajes años para uno decir pobrecitos, repitiendo todos los días la misma bobada que no sirve para nada sí, eso es ser uno muy corto de vista, creer que alguien lleva haciendo lo mismo por miles de años y decir, tan bobos me acordé del culto también tenemos que ir a trabajar eso sí ¿te parece que es importante hablar sobre salud mental masculina? la salud mental masculina yo te doy las gracias a vos ¡Gracias! y ganar tu doctorado sin perder un ritmo. Un futuro diferente es más cerca de lo que piensas con Capella University. Aprende más en capella.edu. Los días de salida de los profesionales están de vuelta a los bajos, con salidas de tiempo limitadas en los suministros que los profesionales necesitan. Tienes un 40% de salida en las aplicaciones mayores. Además, salida un adicional de $100 en cada $1,000 que gastas en las aplicaciones mayores. Y no te pierdas la oportunidad de activar y ganar tres veces los puntos en las aplicaciones de DeWalt y Klein. La salud mental de los hombres es como eso existe? No te voy a hablar de mi caso, pero una pareja se separa y siempre es buscando a ver cómo él fue un HP con ella. Si ella se va con otro, a él se le olvidó regar la matica, motivo ella. Si ella se va con otro, a él se le olvidó regar la matica, motivo por el cual ella se fue con otro. Si ella decide terminarla porque se aburrió, a él se le olvidó regar la matica. Si él es el que se aburre de alguna situación, ¿quién sabe qué era lo que él estaba haciendo? O sea, la salud mental de los hombres sigue siendo una cosa como de algo que no existe. Entonces, como no existe eso, no se habla. Nunca tenemos permiso a estar mal. Nadie tiene ni idea de lo que pasa por la cabeza de un hombre. Si están pasando por una situación económica y nosotros biológicamente tenemos en nuestra cabeza la angustia de proveer, así digan, uy, qué comentario tan machista yo no estoy diciendo nada y yo creo que cualquier hombre es capaz de decir así nos sentimos, así lo vivamos de una manera distinta así yo viva con mi pareja un equipo y los dos estamos ahí es un sentimiento muy masculino nadie sabe cuando a uno le pregunt, mi amor, ¿cómo estás? Y uno, bien. Y uno tiene 350 mil cosas en la cabeza que además ni siquiera nos han dado el permiso de expresarlas. Yo por eso hablo tanto con mis hijos y les digo, está bien que llores, está bien que hables, está bien que preguntes, está bien que digas, bien que preguntes, está bien que digas, está bien ser hombre, está bien ser hombre heterosexual. Cualquiera dirá, ¿cómo así? Hoy en día es casi como si se hubiera vuelto una vergüenza. Yo no me puedo sentir orgulloso de ser hombre heterosexual porque eso quiere decir que soy un misógino homofóbico. ¿Por qué quiere decir eso? Tengo amigos familiares que son gays, me parece fabuloso, cada uno elige lo que quiera. Ser mujer es fabuloso. Así como se ha vuelto una vergüenza la mujer que dice, quiero estar en mi casa y dedicarme a mis hijos. Entonces socialmente es como, ¿cómo te están oprimiendo? No señora, tú tienes derecho. Claro, tengo derecho a estar acá. Yo me dediqué casi año y medio a renunciar a un montón de cosas de mi trabajo y dedicarme a mis hijos. Eso no te hace menos hombre. En ese momento Adriana estaba con la carga encima, no, pero yo tomé la decisión de renunciar a un montón de cosas de mi trabajo y decir yo me voy a dar una licencia de paternidad y me voy a dedicar a mis hijos, no conoziera mal, sino porque quería estar mejor y yo quería vivir eso. Esto que tú haces, yo tengo gente que me ha dicho, ah, eso es un programa donde los hombres se sienten a ser víctimas y a contar todas sus tragedias, y le digo, es que no lo has oído. Y si así es como lo ves, ojalá en algún momento te dieras el permiso, por un segundito, de ser víctima de hablar de tus problemas. Porque a lo largo no se trata de venir a hablar de nuestros problemas, lo que tú decías, se trata de venir a mostrar que somos humanos y que cada uno ha tenido su camino. Yo he hablado tantas veces del amor, de la vida, del matrimonio, de la pareja, que todo el mundo podría decir, de la pareja que todo el mundo podría decir y usted cuando acá pues qué fue lo que pasó pues las cosas pueden cambiar ante todo todo lo que yo hice en ese momento hablaba de mi capacidad de amar de mi capacidad de ver a mi pareja como el proyecto más importante de ver a mi pareja como el proyecto más importante. Eso quiere decir que yo estoy en este tránsito de mi vida, viviendo mi alma, viviendo la experiencia terrenal que vino a vivir y teniendo los aprendizajes que tengo que tener. Y yo estoy atento a recibir los aprendizajes. Sé que durante siglos vivimos un mundo de demasiada energía masculina donde todo se resolvió con guerra, con rabia, con odio, pero yo creo que la solución no es el péndulo durísimo para el otro lado, yo creo que la solución es tratar de traer la energía femenina lo que más se pueda para tratar de venir al centro, en lo que sea que eso signifique para cada quien. Y estoy de acuerdo que la energía femenina se necesita en todos los sentidos. Lo digo tan así que yo siempre lo he dicho muchas veces, yo soy un hombre con una energía muy femenina. Tú eres un hombre con una energía muy femenina. Mónica es una mujer con una energía masculina, con una energía muy yang, lo que llaman para no decir. Las parejas que yo he tenido en la vida han sido mujeres con energía, justamente porque eso es lo que trae como el balance y el equilibrio. Yo creo que los hombres tenemos absolutamente derecho a hacernos vulnerables. Nadie ha salido a las calles a decir, los hombres tienen derecho al 50% de la custodia de los niños. No he visto la primera marcha. Si todo es igual, no he visto la primera marcha. No he visto la primera marcha donde digan, es injusto que haya una empresa hecha solamente por mujeres. Si hay una empresa 100 por ciento de hombres, es un problema. Si hay una empresa 100 por ciento de mujeres, es válido. ¿Dónde está? Entonces digo, estoy de acuerdo y estoy de acuerdo que ha habido un trato súper injusto generacionalmente hacia las mujeres, pero ¿dónde está el punto del centro? ¿Y dónde está donde nosotros nos mostramos a nosotros mismos vulnerables? ¿Dónde está donde nos podemos apoyar? ¿Dónde está donde nos sentamos las mujeres y se sientan a hablar y entre ellas lloran y resuelven y hablan de sus emociones y todo, nosotros siempre, todo está bien, todo el cuerpo, es válido no estar bien, es válido hablar de esto, es válido ver las experiencias del otro y decir, yo estuve ahí, yo estuve ahí los hombres nos merecemos también tener salud mental y cualquiera dirá, pues es obvio no, no es obvio no es obvio, el maltrato hacia los hombres es visto como te sentiste maltratadito no, eso existe y no es que me sentí maltratadito y a muchos hombres se sienten mal y no son que me sentí maltratadito y a muchos hombres muchos hombres se sienten mal y no son capaces de decir nada entonces antes soy yo el que te da las gracias a ti por abrir por abrir estos espacios porque son absolutamente necesarios ojalá todo esto que haces y todo lo que hace tu equipo llegue a a muchos rincones y sean cosas que se hable de nuevo no para tratar de decir pues los hombres también no, todos todos es que tiene que haber para todos en equilibrio y en amor y en armonía sin peleas porque pelear del otro lado es querer solucionar lo mismo desde el ego pero ahora hacia el otro lado y no debería haber pelea si algo tengo claro después de estos episodios es que esto es entre todos. Obvio. Esto es entre todos. Esto no es uno por un lado, otro por el otro. Yo tengo la razón, tú tienes la razón. Yo me merezco más, yo me merezco menos. Hay que aceptar, como tú bien decías. Hay que ser parte de la solución. Pero eso es entre todos. Y de verdad, gracias. Y si algún día hay algo más en lo que pueda sumar en este proceso, cuenta conmigo 100%. Siempre. Igualmente por acá. Siempre. Hola, soy Juan Pablo Raba, junto a mi amigo y productor Dani Posada, te damos la bienvenida a Los Hombres y Yo. Este es un espacio seguro, dedicado a explorar un tema crucial y a menudo pasado por alto, la salud mental, mientras rompemos con los estigmas y estereotipos que la rodean. Acompáñame en este viaje personal en donde me hago muchas preguntas y comparto el impacto que ha tenido en mi bienestar emocional esta búsqueda. Te traeremos conversaciones sinceras con amigos extraordinarios y entrevistas con expertos que nos ofrecerán consejos prácticos para profundizar en las complejidades de la salud mental y la importancia de levantar la mano y buscar ayuda. Este, nuestro espacio, tu espacio, es seguro y se llama Los Hombres Si Lloran, donde la vulnerabilidad es nuestra mayor fortaleza.